Oro y plata

Un broche de aguamarina y una esterlina te regaló.

Tu negro, que era muy pobre, no tuvo un cobre para el amor.

Un pardo de ropa fina para tu ruina te convenció.

Yo digo que una mulata, por oro y plata se enamoró.

¡Ay!

Late que late, y el cuero del parche bate

con manos de chocolate, el negro que la perdió;

rueda que rueda, lo mismo que una moneda,

con ropas de tul y seda, la negra que le mintió.

Todos los cueros están doblando,

Pero sus ojos están llorando,

que un pardo de cuello duro

fumando un puro se la llevó.

¡Ay!

Siga que siga,

no sufras ni la maldigas

que el cielo también castiga

la culpa de la ambición.

La manos en la tambora

mientras tu pena, llora que llora.

Yo digo que es un tesoro

de plata y oro tu corazón.

Tu corazón.

Tu corazón.

Un broche y una esterlina

fueron la ruina de una pasión.

Un pardo con diez monedas

forró de seda tu corazón.

La plata siempre es la plata

que hiere y mata sin compasión,

yo digo que una mulata

por oro y plata se enamoró... ay...

Homero Manzi

Rosario Smowing